Si todavía no nos hemos habituado a esta denominada «nueva normalidad», si aún nos resulta chocante el empleo de las mascarillas y/o guardar una cierta distancia de seguridad en la calle o en el transporte público, la sensación de extrañeza se agudiza al acudir a un evento cultural.
Pudo comprobarse ayer en la presentación de la novela Los últimos románticos, de Txani Rodríguez, en la Biblioteca de Bidebarrieta, de Bilbao. Una situación desacostumbrada en el protocolo pero que no restó dinamismo en la autora ni en sus dos acompañantes, los periodistas Alicia San Juan y Kike Martín.
Los últimos románticos es la cuarta novela de Txani, una autora seguida, querida y respetada, que con este nuevo título se afianza de una manera sólida en el escaparate de la narrativa.
http://www.joseluisurrutia.com/index.php?option=com_content&view=article&id=340:presentacion-de-los-ultimos-romanticos&catid=25&Itemid=222#sigProGalleriaeb3fd0732e
Sinopsis
La vida de Irune transcurre entre su casa y la fábrica de papel en la que trabaja, en un pueblo industrial cerca de Bilbao. Insegura, algo maniática e hipocondríaca, esta mujer es capaz de enfrentarse al mundo cuando cree que debe hacerlo, e intenta vivir de acuerdo con unos valores que la sociedad parece haber olvidado. Su círculo se reduce a los compañeros de trabajo, la vecina y un operador de Renfe al que llama furtivamente para consultar horarios de trenes que nunca llega a tomar.
Cuando surge un conflicto en la fábrica, sin saber muy bien cómo, Irune acaba viéndose involucrada. A partir de ahí, su vida da un giro inesperado y ante ella aparece la oportunidad que, sin saberlo, estaba esperando.
Los últimos románticos es una novela irresistible sobre los sueños que nos mueven a actuar y el valor de lo verdaderamente importante. En esta historia, Txani Rodríguez, dueña de una escritura elegante, luminosa y directa, nos habla sobre lo que nos convierte en comunidad: el cuidado de las personas, la solidaridad y la preservación del entorno natural.
Fragmento de Los últimos románticos